El magistrado Wilson Gómez Ramírez, juez del Tribunal Constitucional, abogó por una estrategia nacional con miras a empoderar a la población sobre la importancia del Himno Nacional y que lo valoren como se merece, por su papel en el afianzamiento del sentimiento patrio.
En ese sentido, el juez constitucional consideró que las autoridades educativas del país están llamadas a redoblar sus esfuerzos en interés de crear estrategias orientadas a conseguir que el estudiantado de los niveles de media y básica, así como los ciudadanos en general, conozcan el Himno Nacional y cuánto significa éste en la formación cívica.
El también vicepresidente del Instituto Duartiano dijo que el Himno Nacional dominicano sobrevivió a varios intentos dirigidos a cambiarlo o desnaturalizarlo hasta que al fin logró constitucionalizarse en el año 1966, pese a que los otros dos símbolos patrios, la Bandera y el Escudo nacionales se insertaron en el texto supremo desde su primera versión, en el año 1844.
El juez constitucional dictó la conferencia “Orígenes y Constitucionalidad del Himno Nacional Dominicano”, en el auditorio del Museo de Historia Natural, en el marco de las actividades que desarrolla la alta corte en la “XVIII Feria Internacional del Libro Santo Domingo 2015”, dedicada al escritor Manuel Rueda y a Perú, como país invitado.
En su ponencia, el magistrado Wilson Gómez expresó que el “Himno Patrio”, como originalmente se le llamó el Himno Nacional dominicano, fue concebido por el maestro José Reyes, quien solicitó la letra al también maestro, abogado y poeta Emilio Prud’Homme y luego hizo la correspondiente composición musical, estrenándolo el 17 de agosto de 1883, al cumplirse el 20 aniversario de la Guerra Restauradora de la independencia dominicana.
Señaló que entre las amenazas que se produjeron contra este símbolo sonoro de la Patria figuró la propuesta de alabarderos del dictador Rafael Leonidas Trujillo que pretendieron dedicar una estrofa para resaltar la “obra de gobierno” y desagraviarlo con motivo de un atentado que se había producido en su contra por parte de jóvenes de la ciudad de Santiago.
Manifestó que el Himno Nacional fue aprobado por el Congreso Nacional en 1897 y tal decisión fue remitida al Poder Ejecutivo y se mantuvo en un limbo hasta el año 1934, momento en que se promulgó, originándose la Ley número 700, mediante la cual se oficializó la pieza patriótica, 37 años después.
La conferencia “Orígenes y Constitucionalidad del Himno Nacional Dominicano” tuvo como maestra de ceremonia a Marjorie Espinosa Rouge, quien pronunció las palabras introductorias y se inició formalmente con la interpretación del Himno Nacional y la presentación del conferencista.
El calendario incluyó la conferencia: “El Amparo como Mecanismo en la Defensa de los Derechos Fundamentales”, a cargo del magistrado Hermógenes Acosta de los Santos y la puesta en circulación del libro “Primer Congreso sobre Derecho y Justicia Constitucional”.