Cápsulas sobre decisiones emitidas por el TC

Las sentencias emitidas por el Tribunal Constitucional se han convertido en precedentes importantes para defender los derechos básicos que influyen de manera directa en la vida de los dominicanos y dominicanas, quienes gracias a estas decisiones constituciones han logrado reivindicar derechos que, en la mayoría de los casos, parecían inaccesibles y hasta imposibles de conseguir.

Cada semana conoceremos una de las sentencias relacionada con el derecho a la educación, a la protección del medioambiente, a la dignidad humana, a la pensión al sobreviviente, a un régimen electoral, de partidos, agrupaciones y movimientos políticos que incluya las candidaturas y la cuota de las mujeres y al acceso a la información personal, entre otros muchos interesantes temas. 

Para comenzar nos estaremos refiriendo al “Derecho al trabajo y a una vida digna”, una sentencia con la que el Tribunal Constitucional dejó establecida la necesidad de defender la oportunidad que tienen los seres humanos de producir bienes que le permitan vivir dignamente, así como respetar la capacidad física e intelectual de cada persona.

Sentencia TC/0005/20: Derecho al trabajo – Vida digna y desarrollo personal

Con esta sentencia, el Tribunal Constitucional ha establecido la importancia de defender derechos básicos, como el derecho al trabajo, la igualdad y la dignidad humana, asumiendo que se trata de complementos necesarios que permiten producir los bienes y servicios que hacen falta para vivir dignamente.

La aprobación a la impugnación de la norma 101.2, de la Ley 63-17, elimina la limitación que establecía la necesidad de tener un mínimo de 21 años y un máximo de 65 para adquirir la categoría de conductor de transporte público. También se abren las puertas para las personas mayores con deseos de trabajar.

Tomando en cuenta que la legislación vigente en materia de tránsito de muchos países de Iberoamérica no dispone de reglas relacionadas con la edad, el Tribunal Constitucional  instituyó que se trataba de una norma que discriminaba a los choferes por la edad.

El otro argumento planteado se refiere a la necesidad de respetar la capacidad física e intelectual de cada individuo.